MADRID, 19 Jun. (CHANCE) -
Los Reyes Felipe y Letizia concluyen este 19 de junio su viaje por Estados Unidos con visita a Washington, donde Donald Trump y Melania Knavs les recibirán en la Casa Blanca.
Este encuentro entre los monarcas españoles y Trump y Melania justo se cumple en el cuarto aniversario de la proclamación de Felipe VI como Rey de España. Y en esta ocasión seguro que al Rey le toca, tratar o comentar con Donald Trump la subida de aranceles que quiere imponer el presidente norteamericano y que puede afectar tanto a la aceituna española.
Pero este no es el único momento delicado por el que el Rey Felipe tiene que pasar. Ya que hoy pasa de puntillas por el lugar en el que vivía su hermana la Infanta Cristina con Iñaki Urdangarin.
Corría el 2009 cuando aquellos Duques de Palma se instalaban en la capital de Estados Unidos con sus hijos, mientras Iñaki Urdangarin trabajaba para Telefónica Internacional.
Iñaki Urdangarin cobraba un sueldo de Telefónica mientras estuvo expatriado en Washington de unos 350.000 euros al año, algo que venía a ser casi un 17 por ciento más de lo que ganaba el Rey Juan Carlos como jefe del Estado. La compañía asumía, entre otros gastos, el coste de su vivienda en la capital estadounidense, como ocurre con cualquier expatriado de Telefónica, explicaba el propio duque de Palma durante su declaración ante el juez instructor del caso Nóos, José Castro, el pasado 23 de febrero, a la que tenía acceso Europa Press.
Es difícil no recordar esos años vividos y la situación que viven a nivel familiar. Todo ese proceso hizo que justo hace unos días se cumpliera el aniversario de otra fecha en este caso dolorosa para el Rey Felipe ya que el 12 junio, para no perjudicar a la Corona Española, le revocaba los derechos dinásticos a su hermana Cristina que acababa imputada en el Caso Nóos a petición de Manos Limpias.
Solo el Rey poseía la capacidad de retirarle ese título nobiliario... que le concedió otro monarca, su padre.
En forma de real decreto se publicaba en el Boletín Oficial del Estado (BOE) donde rezaba prohibir específicamente a la Infanta que hiciera uso de ese título, que le fue concedido por su padre, el Rey Juan Carlos, con motivo de su enlace matrimonial con Urdangarin en 1997.
En su discurso de proclamación, Felipe VI se comprometía a hacer más ejemplar a la institución porque así lo demandan "con razón" los ciudadanos... La Casa del Rey -limitada exclusivamente a Felipe de Borbón, Letizia Ortiz, Leonor de Borbón, Princesa de Asturias y la Infanta Sofía- anunciaba ese jueves 11 de junio de 2015 su determinación.
En vísperas del 50 cumpleaños de Cristina de Borbón, saltaba la noticia de que perdía su título como Duquesa de Palma, un título de lo más importante dentro de la Corona ya que la Familia Real siempre ha pasado unos días durante su temporada estival en el palacio de Marivent y presidiendo la tradicional misa del Domingo de Resurrección en Semana Santa.
Esta era una de las decisiones más importantes a las que el marido de la Reina Letizia se veía obligado a tomar en el primer año de su reinado aunque siempre hubo una diferencia de exposiciones en cuanto a que habría sido la Infanta Cristina la que había renunciado a sus derechos dinásticos a través de una carta al Rey. Una carta que habría llegado antes o después del anuncio...
A día de hoy, Iñaki Urdangarin ha ingresado en la prisión de mujeres de Brieva, donde es el único hombre dentro del penitenciario, Cristina de Borbón está con sus hijos asumiendo esta nueva situación en la intimidad. La Reina Sofía -muy unida a su hija- permanecía en Madrid donde se apoyaba en dos de sus mayores bastiones su hermana Irene de Grecia y su cuñada Doña Pilar. Las tres comían en casa de esta última, mientras las noticias se sucedían. La Infanta Elena, se encontraba cumpliendo con su agenda ya que acudía a la entrega de los Premios del XXVII Concurso de Pintura Infantil y Juvenil para Centros Escolares 2017-2018 de Patrimonio Nacional.
Mientras los Reyes de España cumpliendo sus obligaciones como Jefe de Estado y Reina Consorte, se encuentran con el presidente de Estados Unidos, Donald y su esposa Melania Trump en la Casa Blanca, muy cerquita de donde vivieron Cristina y Urdangarin en Washington.
