BARCELONA, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos de Bombers de la Generalitat han pedido este viernes a la Conselleria de Interior la equiparación de sus condiciones laborales con las de los Bomberos de Barcelona, en una reunión a la que ha asistido el director general de Bombers, Manuel Pardo.
Según ha informado a Europa Press el delegado sindical Manuel Titos, la reunión ha terminado sin acuerdo porque la Administración les ha propuesto que hagan 1.838 horas anuales, a pesar de que ya hacen 1.790, por encima de las 1.688 horas que serían "normales".
"Seríamos los bomberos que más trabajan de España", ha lamentado Titos, que ha explicado que los Bombers harán asambleas para decidir qué hacer ante la propuesta del departamento, con la que los sindicatos no están conformes.
Ha criticado que no tienen convenio desde 2006 y que "no puede ser que la mala gestión de los políticos" les pase factura.
CONCENTRACIÓN DE PROTESTA
Más de medio centenar de bomberos se han concentrado ante Interior durante la mañana de este viernes y han leído un manifiesto en el que han criticado que sus condiciones han sido reguladas "de forma arbitraria y unilateral por decretos y circulares, algunas de ellas sin fundamento jurídico".
Han señalado que los Bombers realizan un 10% más de jornada laboral que el resto de funcionarios --160 horas aproximadamente--, incluidos los Mossos, 230 horas más que los bomberos del Ayuntamiento de Barcelona, y que este exceso se está pagando a tres euros por debajo del precio de hora trabajada.
"En el cuerpo de Bombers de la Generalitat somos 2.200 bomberos operativos para toda Catalunya. En 2017 realizamos cerca de medio millón de horas extras", han lamentado.
DEFICIENCIAS MATERIALES
También han criticado que la flota de vehículos del cuerpo tiene una media de 15 años de antigüedad y que están "obsoletos", mientras que Interior prevé nuevos vehículos para principios de 2020.
Entre las deficiencias materiales, también han señalado falta de guantes, mangueras, herramientas, contratos de mantenimiento retrasados, parques "ruinosos", falta de personal y ausencia de médico de guardia todos los días del año, entre otras.
